martes, 5 de junio de 2007

El emperador va en busca de la corona

Rogelio sigue en camino a obtener el único Grand Slam que le falta. En un partido cambiante, venció a Tommy Robredo por 7-5, 1-6, 6-1 y 6-2 en poco más de dos horas. Ahora espera el choque de semifinales ante Davydenko, aunque en su cabeza tiene un solo pensamiento: enfrentar a Rafael Nadal en la final del torneo.
¿Cómo definir la actuación del número 1 en el día de hoy? Resulta complicado hacerlo. En algunos momentos mostró una superioridad arrolladora, jugando a un altísimo nivel. En otros erró más de la cuenta, equivocándose en pelotas fáciles. Su gran problema fue la falta de regularidad. Éste es un lujo que no puede darse si quiere vencer a Nadal en una probable final. Contra el malllorquín tendrá que estar al 100 % durante todo el encuentro. De lo contrario, tendrá que esperar un año más para ganar en Francia.
Lo mejor de Roger se vio en los dos últimos sets, cuando le dio una clínica de tenis a Robredo. Utilizaba el revés para presionar y con su majestuosa derecha definía los puntos. La volea le funcionaba a la perfección. El español no sabía qué hacer para anular su juego. Cualquier intento de cambio era rápidamente contrarrestado por el suizo. La afición aplaudía con fervor, encantada de presenciar un espectáculo semejante. Así fue como, en un parpadeo, se llevó el match, logrando el pase a la próxima instancia. Cuando el umpire dijo la mágica frase "game, set and match Federer", como tantas otras veces, todo el estadio lo ovacionó. Los súbditos se rindieron ante el emperador.

1 comentario:

Anónimo dijo...

mepa que a Roger no le saca nadie este rolanga